Sobre el machismo

Honestamente, en este tema me siento perdida, más no derrotada.

La semana pasada tuve que ir a una tienda de barrio a comprar plátanos, el dueño un musulmán, hablaba con un paisano y sin girar a verme, aceptó mi pago de mala gana, de hecho tuve que hacer un esfuerzo para colocar la mercancía en el mostrador y que me la cobraran, porque el paisano no se quitaba del medio.

Descortesía cero por no decir que perdió una posible clienta.

Lo podría entender porque su cultura es radicalmente distinta a la mía y además aunque vivan en Occidente jamás aceptarán nuestra forma de vida, muy por el contrario intentarán de mil formas que tú te adaptes y amoldes a ellos (eso incluye a las mujeres musulmanas).

¿Pero qué pasa cuando el machismo se palpa y vive con personas de tu misma cultura?

¿Cómo reaccionar?

1: Aún recuerdo cuando en Coruña, llevaba a mi hija al pediatra, era un doctor querido y respetado por todos; debía ir con mi marido porque el hombre era incapaz de dirigirme la palabra siendo yo la madre. Diagnósticos y tratamientos eran explicados pacientemente al padre de la criatura, no a mi.

2: Colegas de profesión: resuena en mis oídos lo escuchado en un ascensor: si X (una compañera de trabajo) quiere ascenso primero tendrá que pasar por go. Yo empezaba a trabajar como contable, y de esto hace más de 15 años, pero sería el típico caso para "Me too".

3: Una amiga me comentaba que había ido con su peque y el marido a comprar a la famosa tienda sueca. El peque comenzó a llorar por lo que tuvieron que ir al estacionamiento a buscar el coche y darle el tete al niño. La madre preparó el biberón y se quedó sentada al volante,  mientras que el padre en el asiento trasero le daba el biberón al niño. El padre comentó que parecían "progres" y que ya estarían contentas las de Podemos. 

A lo que yo agrego un: Sin palabras... Y si esto fuera de poner emojis, aquí encajaría perfectamente la carita con los ojos entornados al cielo.

4: Viendo un programa de la periodista gastronómica Verónica Zumarracálegui llamado Dos Miradas, iba con un crítico gastronómico de renombre, entrevistando a un chef de un clásico restaurante madrileño, el hombre fue incapaz de mirarla durante todo el segmento, le hablaba afablemente al crítico; a ella se le notaba la incomodidad y no hacía más que sonreír ligeramente y afirmar con la cabeza. Le sobró educación y clase ante semejante hombre.

Me pregunto: ¿De verdad funciona para algo todo el dinero que se destina al Ministerio de la Igualdad? porque el machismo desde su forma micro hasta la macro continúa en toda su extensión.

¿De qué sirve que los hombres estén perdiendo la poca cortesía que tenían hasta hace poco? Por ejemplo, ceder el puesto a una mujer, abrir la puerta del coche, ayudar a cargar una bolsa.

¿De qué sirve que en un instituto se critique una letra de Amaral? (Sin ti no soy nada)

¿De qué sirve que las propias mujeres nos ataquemos unas a otras?

Porque si encima, estás en contra de ciertos movimientos feministas te condenan de por vida.

Si dices que prefieres buscarte la forma de ganarte el pan en casa, criando a tus hijos sin dejárselos a terceros muchas insinúan que eres una desequilibrada mental y que no vives acorde a los tiempos actuales.

¿Será que yo también soy machista?

Estoy tan perdida en este tema...